Mientras la oposición se mantiene cohesionada, las grietas a lo interno del oficialismo, se han agudizado desde la polémica decisión de convocar a un manipulado referéndum para una nueva Constitución, lo que produjo el alzamiento de la Fiscal General Luisa Ortega Díaz, hoy convertida en símbolo de la disidencia oficialista y a punto de ser destituida del cargo.

El proceso, iniciativa del líder de Acción Ciudadana Otton Solis, se extendió por siete meses y sale a la luz pública justo cuando todos los partidos están por terminar la selección de sus candidatos de cara a la contienda electoral de febrero. Justamente el desafío ahora será que los aspirantes a la silla presidencial lo avalen abiertamente, con lo que tendríamos 59 acuerdos firmados para ser incorporados en los planes de gobierno.

Se requiere con urgencia remozar el multilateralismo de la OEA y la ONU, porque las únicas soluciones que harán viable la convivencia humana a futuro, serán los acuerdos de muchos países y de múltiples sectores. Por ello, resulta tan desalentador el accionar de la diplomacia estadounidense en la conducción errática y errada del Presidente Donald Trump.

Consecuente con su formación profesional y el ejercicio del cargo que tuvo por casi tres años, Ramos enfoca su propuesta en el necesario mejoramiento de la economía como uno de los motores para solventar la difícil situación fiscal del país.

Carlos Alvarado es -hasta para el observador menos acucioso- el candidato del oficialismo; algo que no se oculta y que más bien se confirma con el enfoque de su campaña bajo el lema de "el cambio no ha terminado", así como con sus spots publicitarios en redes sociales.

Lo ocurrido el sábado pasado cuando el país completo quedó sin fluido eléctrico -lo sabemos ahora todos- fue a consecuencia de que una línea de transmisión eléctrica en Panamá produjo un desequilibrio en el sistema que interconecta a todo el Istmo Centroamericano.