Por denunciar y pedir investigar los extremos del negociado del cemento, -todavía en fase de indagaciones judiciales- la Expresidenta de la Junta Directiva del Banco de Costa Rica aseguró que fue perseguida y coaccionada por sus superiores políticos en Casa Presidencial durante la pasada administración.
Y no es que fueran precisamente nuevas las afirmaciones de la empresaria. Es que las formuló esta semana bajo fe de juramento ante una comisión legislativa, lo que evidentemente trajo a valor presente el caso y consecuentemente la red de tutela que algunos funcionarios del BCR tuvieron desde Zapote , el Congreso y el Poder Judicial, antes, durante e incluso después del convulso momento que marcó los créditos de la malograda política pública que intentó romper el duopolio de la comercialización de esa materia prima en el país.
El nombre de Mónica Segnini está escrito ya en las crónicas del cuatrienio anterior del BCR. En sus propias palabras "si uno toma valor para hacer algo, además de hacerlo bien, debe darlo todo...porque tener el valor de decir la verdad es quizás la mejor forma de practicar la lealtad. Por más difícil que eso sea". Con ella terminamos nuestra semana.