Fue un fin de semana largo y de declaraciones altisonantes.
La primera en llamar la atención fue la jefa de la bancada oficialista Pilar Cisneros, quien dijo al semanario El Financiero “… ¿para qué vamos a recurrir a la Asamblea (Legislativa) si existe la posibilidad de que muchas cosas se puedan hacer por decretos ejecutivos? ¿Para qué vamos a recurrir a la Asamblea? La Asamblea es siempre un enredo y ¿por qué es un enredo? Porque es siempre un proceso muy engorroso”. Se refería al proceso democrático de toma de decisiones.
A tono con la secuencia vista en otras ocasiones, el presidente Chaves hizo eco en Guanacaste del tema cuando le pidió a los asistentes a la tradicional parada en Corralillo de Nicoya “… Necesito que le digan a los diputados y diputadas que los están observando; que están observando cada voto que ellos hagan, cada acción”.
Horas más tarde, este lunes, el mandatario descifró el mensaje. Explicó que los diputados “le están jugando chapitas” con la aprobación de los eurobonos. La verdad el común de los asistentes no sabían nada de eurobonos, pero lo de jugar chapitas les hizo mucha gracia y arrancó muchos aplausos.
El partido de gobierno entiende entonces que la Asamblea Legislativa es un estorbo democrático y lo mejor es pedirle a los diputados que le aprueben en una sola jornada el cheque de seis mil millones de dólares en eurobonos que el anterior gobierno de Carlos Alvarado pidió también y no le fueron autorizados.
El presidente legislativo, Rodrigo Arias, calificó las declaraciones del presidente Chaves como desafortunadas e inconvenientes. Seguramente poco efectiva la respuesta, pues el escenario político público mediático lo tiene tomado por completo el mandatario.
Más allá de los artilugios verbales, ¿qué presagia el primer período de sesiones ordinarias del Congreso que se inicia la próxima semana? Lo analizamos con la politóloga Eugenia Aguirre este martes en Hablando Claro.