Es noticia en el mundo: Emmanuel Macron dirigirá los destinos de Francia cinco años más.
Con una solvencia contundente, pero con un abstencionismo elevadísimo, el mandatario reelecto este domingo reconoció haber recaudado una gran cantidad de votos no a su favor, sino en contra de la ultraderecha. Los analistas lo validan. “El candidato más detestado se acabó imponiendo a la candidata más temida”
Europa respira con tranquilidad. Por ahora. Porque el avance de la ultraderecha sigue marcando terreno. Pero la coyuntura de hoy confirma el momento de los europeístas en el contexto de la guerra con Putin, que -puede decirse- también perdió esta elección.
Conversaremos de todo ello este lunes en Hablando Claro, pero también de lo nuestro.
Al norte, Nicaragua anunció la expulsión de la OEA de su territorio justo este domingo. La noticia cae mal, en un momento en que al parecer la próxima administración Chaves Robles, cuyos primeros ministros designó el viernes pasado (y entre ellos a su futuro Canciller) anuncia el envío de embajador de ese país, así como reevaluar las relaciones con Venezuela; algo que antes del 8 de mayo, ya motivó pedir a pedir explicaciones al Partido Liberación Nacional, la mayor minoría del nuevo Congreso, que asume el primero de mayo. Luces de alerta temprana para el novel gobierno. Y por cierto, fue noticioso este fin de semana un videoclip del presidente electo, poniendo en la agenda de nuevo el tema del acoso sexual laboral que se le investigó en el Banco Mundial para anunciar acto seguido un compromiso de “cero tolerancia” contra la violencia a las mujeres y anunciando la conformación de un grupo especial que coordinará la vicepresidenta Munive para un plan en la materia.
En tanto, la tensión por el hackeo informático parece darle respiro al Ejecutivo saliente, al menos en lo que a Hacienda se refiere, pues anunció el pago puntual de todos sus compromisos, aunque por supuesto no da por finalizada la crisis. Por el contrario, este fin de semana, la electrificadora de Cartago, JASEC, admitió la vulneración de sus sistemas y la compañía Aeropost (Aerocasillas) confirmó también una violación que le obligó a solicitar a los clientes destruir sus tarjetas de crédito y estar atentos a actividades fraudulentas. No se conoce aún la naturaleza de la afectación ni se han señalado presuntos o probables responsables.