Está visto que el poder de los alcaldes sobre decisiones en la Asamblea Legislativa está echando raíces de hiedra invasiva. Esto no es para nada nuevo ni sorpresivo, solo confirma una especie de paradoja en el balance de pesos y contrapesos en el ejercicio del poder. En su día, líderes políticos de la talla de la expresidenta Laura Chinchilla y del expresidente legislativo y ex ministro de Educación, Francisco Antonio Pacheco lo advirtieron. La municipalización del primer poder de la República y el peso de sus pareceres sobre las estructuras de los dos partidos políticos tradicionales, están ahora dando muestras de que todo podría mantenerse más o menos como está en punto a la necesidad de detener la sangría que está implicando para la credibilidad democrática, la reelección sempiterna de los alcaldes.
El viejo dicho de “hecha la ley, hecha la trampa” es el que un grupo de alcaldes y diputados pretenden hacer realidad. ¿Cómo? Muy fácil: al proyecto de ley que cortaría por fin la nociva reelección indefinida por una nueva normativa para ejercer únicamente hasta dos períodos en el cargo con posibilidad de volver a presentarse luego tras ocho años de separación, se la harían sendos “remiendos”.
Uno consistiría en que la postulación se permitiría con solo un período de refrescamiento; es decir, cuatro años y no ocho. El otro, argumentando que la ley no puede ser retroactiva (¿?) los diputados municipalistas pondrían un transitorio para que la ley no pueda aplicársele a todos los alcaldes que hoy están ejerciendo el puesto; lo cual significaría simple y ridículamente que la ley entraría a regir hasta el año 2028. Es decir, una sencilla ley con un trámite más complejo que el de una reforma constitucional.
Sin andarse con rodeos, el diputado oficialista y ex alcalde de Aserrí, Víctor Morales Mora pidió ayuda para rescatar el proyecto. “Quienes queremos terminar con la reelección de los alcaldes no somos muchos y, por eso, requerimos del apoyo de la ciudadanía que, harta de la corrupción, ponga bajo escrutinio a la Asamblea Legislativa y no permita que el bipartidismo se vaya a celebrar la Navidad sabiendo que ha asegurado a los “diamantes”” (alcaldes hoy investigados judicialmente) la oportunidad de seguir gozando de un poder que han concentrado inconvenientemente por largo tiempo.
Siendo así, y convencidos de la necesidad democrática de enderezar este proyecto por su cauce, en Hablando Claro hacemos lo propio, conversamos con el diputado Morales Mora.