Con la variante Delta del SARS-CoV-2 confirmada ya en nuestro territorio, la llegada este jueves de 250.380 dosis de vacunas de Pfizer adicionándose a las 500 mil que nos donó Estados Unidos, y que han tardado que lo que tarda el pan en salir del horno, todos debemos tener claro que estamos en un momento crucial para acelerar la inoculación tanto como sea posible y aguantar también todo lo que nos sea posible, cumpliendo con las restricciones impuestas, que hay que decirlo, son pocas y por tanto debemos observarlas con responsabilidad.
No importa cuánto sea el agobio y hasta el hastío que nos impliquen las limitaciones aún vigentes, lo cierto es que los espejos han estado ahí todo el tiempo para observar otras realidades y aprender de ellas. Si, aunque nos cueste, el mundo va mucho más allá de nuestras (a veces) limitadas visiones. Estados Unidos va a una nueva ola de contagios, la de los no vacunados. Aunque el presidente Biden aspiró a la meta de 70 % de inoculados para la recién pasada celebración de Independencia el 4 de julio, eso no fue posible. Paradójico tratándose de un país sin limitaciones de suministro. Entendible tratándose de una nación con tantos antivacunas.
En Francia, el presidente Emmanuel Macron justo en el día de la Fiesta Nacional el 14 de julio, anunció nuevas restricciones incluyendo confinamiento, toque de queda y certificado de vacunación para ingresar a teatros, cines y comercios.
En Madrid, Cantabria, Cataluña, la Comunidad Valenciana y otras regiones españolas hay toque de queda nocturno y restricciones de acceso por la nueva ola de contagios. Todo esto sucede en sitios donde se está vacunando intensamente; pero donde también hay resistencia especialmente de gente joven a la vacunación.
En nuestro país, por factores culturales y educativos dichosamente la reticencia vacunal es baja. Por el orden del 14% y ello implica que seremos capaces de alcanzar la inmunidad de rebaño (70 % - 80 %) por la convicción de los costarricenses, la capacidad del sistema de salud y la constante llegada de las vacunas contratadas que aún deben arribar, con énfasis en este trimestre en curso (julio-setiembre).
Mientras tanto, algunas restricciones aún persisten precisamente porque la disminución de los contagios es lenta y para la navidad las autoridades proyectan que la variante delta será responsable del 75 % de los casos. Aun así nuestro desempeño es más que notable. Este jueves, la Dra. Carissa Etienne directora de la Organización Panamericana de la Salud, dijo que el país está lejos de un repunte del virus dado que nuestro proceso de vacunación avanza más rápido que el de otros países latinoamericanos.
Sobre el curso de acción de la política sanitaria en pandemia conversamos con el ministro de Salud Daniel Salas.