Fotografía: Katya Alvarado / Semanario Universidad.
Podríamos pensar que la renuncia de Ottón Solís a la jefatura de la delegación nacional ante la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, cierra un capítulo de convulsión política interna de una semana en el país. Pero todo parece indicar que esto aún no acaba.
Por el momento el pulso desarrollado entre el presidente de la República y la Asamblea Legislativa, el Ministerio de Comercio Exterior y las cámaras empresariales, lo perdió el Mandatario.
A vista de la opinión pública (y a falta de información que no conocemos y por tanto no podemos entender) lo simple, lo sencillo, lo superficial, es ver esto como un empecinamiento del presidente Alvarado con el nombramiento del fundador del Partido Acción Ciudadana en el Club de las Buenas Prácticas.
Pero es más que eso. En el pulso de poder entre COMEX, bajo cuya égida quedó supeditada la gestión nacional en la OCDE y el resto del Consejo de Gobierno, ahora se abren otras interrogantes: ¿renunciará el presidente a nombrar a su propio jefe de delegación, como titular de la política exterior del estado? ¿Habrá nuevas presiones políticas para dejar en el cargo al actual delegado que sí es del riñón de COMEX? ¿Dejará el puesto el ministro Andrés Valenciano? ¿Habrá nuevas tácticas para no aprobar el acuerdo con el FMI o los proyectos relacionados?.
De acuerdo con el politólogo Gustavo Araya, parafraseando al sociólogo Nicos Poutlantzas “la fracción dominante (exportador/financiero) se impuso. El bloque en el poder no ha sufrido mayor reconfiguración (ni en el marco jurídico, ni en el plano político) desde que llegó el PAC al poder. ¿Por qué habría de ser diferente?”.
Entonces, en lo neurálgico ¿será que nuestra membresía en la OCDE de verdad servirá para resolver los temas sensibles de concentración de mercados y falta de competencia en materias tan delicadas como el azúcar, el arroz, tarifas eléctricas, las de colegios profesionales, combustibles, etc? ¿Será que avanzaremos con los temas de transferencias de renta y otros beneficios que afectan a toda la sociedad por décadas para sostener los privilegios consolidados de grupos de presión?.
Con el politólogo Gustavo Araya y el ex ministro de Comercio Exterior Alexander Mora, conversamos sobre nuestros primeros pasos como miembros plenos en la OCDE y la ruta a seguir.