De la misma forma en que las defensas del cuerpo humano luchan denodadamente contra los cuerpos extraños que lo intentan colonizar, las defensas del estado solidario que hemos construido a lo largo de décadas de nuestro Pacto Social Fundamental, están preparando todos sus anticuerpos para proteger a los más ciudadanos más vulnerables socioeconómicamente en esta crisis.
Así podríamos explicar la afirmación del Ministro de Desarrollo Humano e Inclusión Social en el sentido de hacer hasta lo imposible para “proteger, proteger y proteger: la salud, los ingresos, los empleos, la unión y la cohesión social”.
Claro que una cosa es decirlo y otra muy distinta poder concretar la gigantesca tarea de sostenimiento de las personas y grupos más vulnerables de nuestra sociedad, dada la magnitud de la debacle económica que significa esta pandemia.
El ministro Juan Luis Bermúdez adelantó este lunes que ya se ejecutan más de medio centenar de acciones para resguardar familias en pobreza, asentamientos informales, poblaciones indígenas, personas en situación de calle, beneficiarios de la red de cuido, personas con discapacidad y hogares de larga estancia.
Con el ministro Bermúdez avanzamos este martes en la comprensión de este aspecto sensibilísimo del impacto de Covid 19, en el cierre de marzo, nuestro primer mes de afectación con 330 casos confirmados, de los cuales, 15 están en hospitalización (7 en cuidados críticos).