El viernes la Sala Constitucional puso la cereza en el pastel noticioso de una semana intensa en nuestro país. Los magistrados emitieron su dictamen sobre el proyecto que reforma la legislación sobre huelgas.
Avalaron la suspensión del pago para los huelguistas (salvo declaratoria de legalidad) y la clasificación de servicios esenciales, pero señalaron un error de procedimiento y un asunto de fondo sobre la disolución de sindicatos. Habrá de corregirse el texto y repetirse la votación legislativa en primer debate, aquella que el 3 de septiembre conjuntó el voto de 40 diputados de distintas fracciones. ¿Se repetirá también ese apoyo sólido? Quizás, pero es difícil hacer apuestas en esta Asamblea Legislativa levantisca.
El tema de las huelgas no viene solo. Está rodeado de los asuntos sobre empleo público y políticas fiscales, ahora que el presidente Carlos Alvarado define quién sustituirá a Rocío Aguilar en el Ministerio de Hacienda. Los distintos sectores miran atentos, con la esperanza unos de que se siga la línea dura y otros de que se afloje. Se trata de lograr los complicadísimos equilibrios, esos que parecieran haberse roto en otros países de la región, como muestran las noticias internacionales. De ello hablamos con el doctor Constantino Urcuyo.
