El jueves 14 de septiembre el mundo supo de un ataque con drones y misiles que sufrió Arabia Saudita en su campo petrolero de Khurais y en la refinería de Abqaiq, la mayor planta de refinamiento de crudo del planeta.
Nos dimos cuenta, claro, porque aquí se sienten los efectos directamente. El precio del petróleo sufrió entonces una escalada de 15%, la mayor en 30 años, aunque pronto volvió a bajar. Los sauditas trabajan a todo tren para reparar los daños y estabilizar su producción, pero el ambiente está alterado en Oriente Medio y el mundo lo observa atento. Todos temen secuelas.
Las circunstancias de ese evento y el cuadro de poder que rodea a Oriente Medio, con la obvia participación de Estados Unidos, son los elementos que tratamos este martes en nuestro Hablando Claro con Sergio Moya, especialista en estudios de esa región del mundo tan compleja y tan determinante.