Si la desigualdad y la violencia son los más grandes desafíos que debemos vencer en América Latina (por supuesto, Costa Rica incluida) es a las niñas, las adolescentes y las mujeres jóvenes a las que más debe protegerse, porque es a ellas a quienes más afectan estas condiciones.
Y es fácil entender además que si son ellas quienes perpetúan los círculos de la pobreza y la exclusión, si son empoderadas desde pequeñas, podrán romper las cadenas que les permitirán mejorar no sólo su condición personal, sino la calidad de vida de la sociedad en su conjunto.
Es un desafío ético, jurídico, de salud pública, de seguridad ciudadana, que pasa entre muchas otras áreas, por los muy sensibles temas de educación y de salud sexual y reproductiva.
Por eso, se celebró en Costa Rica este martes por primera vez, el Día Mundial de las Niñas, una fecha que se conmemora internacionalmente desde el año 2012.
Para conocer acciones que permitan la materialización de estos objetivos y asegurar los derechos de niñas y adolescentes, conversamos con la Directora Regional de UNICEF para América Latina y el Caribe, María Cristina Perceval en Hablando Claro.
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