De concretarse la exclusión del líder mundial chino de las telecomunicaciones del despliegue de la tecnología 5 G en Costa Rica -como pretende el Poder Ejecutivo- las tarifas de internet y telefonía móvil podrían subir hasta un 40%, mientras las suscripciones podrían reducirse hasta en un 43%.
Tal conclusión emana de un estudio del Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible (CINPE) de la Universidad Nacional, que proyectó un escenario lúgubre: en ocho años podrían quedar por fuera de la moderna tecnología hasta 3.5 millones de personas, mientras que en un lapso de cinco años, el país enfrentaría hasta $1.360 millones en gastos adicionales con perjuicios directos en los sectores productivos de manufacturas, comercio, información y comunicación.
¿Cómo y por qué el escenario sería tan pernicioso? El asunto es que las empresas operadoras de telecomunicaciones han realizado multimillonarias inversiones en el despliegue de la infraestructura de las redes existentes con la tecnología de Huawei y al proscribirse ahora, habría que desplegar nuevas redes para sustituir las bases instaladas.
¿Cómo se vislumbra el futuro de esta situación compleja? ¿Cómo desarrollarnos tecnológicamente y no quedarnos atrás, sin poner en riesgo temas de seguridad cibernética, como argumenta el gobierno?
Para conocer las bases y alcances de este estudio, así como los impactos económicos, sociales y de brecha digital del polémico despliegue de la 5G conversamos con los investigadores Olman Segura y Leiner Vargas.
Audio del programa