A falta de iniciativas serias, estructurales de transformación y modernización del gasto y del endeudamiento público, y confrontados con la necesidad de cumplir con la regla fiscal (o con lo que de ella queda) un tenebroso recorte de gasto social empieza a darse en detrimento, claro, de la salud y la educación que afectará a los más humildes y necesitados. La mayoría.
Como si esto fuera poco, para cumplir con esas rigurosidades, el presupuesto ordinario de la República que los diputados examinan de cara a su aprobación a más tardar el último día de noviembre, Hacienda dejó por fuera gastos ineludibles que deberá afrontar, como por ejemplo las cuotas y otras aportaciones estatales a la Caja Costarricense del Seguro Social.
¿Cuál es la idea de "engañarnos" con estos recortes y estas omisiones?
La Contralora General de la República, Marta Acosta, sin traspasar las formas correctas del lenguaje político, dejó poco margen a la invención en su comparecencia la semana pasada ante la Asamblea Legislativa.
Entre muchas otras cosas, dijo que los recortes a distintas instituciones fueron hechos “sin ningún criterio ni definición de prioridades”.
Enfatizó, por tanto, que los más vulnerables pagarán los platos rotos, ellos son “la válvula de escape… Los ajustes llegan si usted los hace y, si usted no los hace, también llegan, pero llegan más dolorosos… el ajuste se está empezando a dar solo”.
¿Hay maneras de corregir este temerario plan de gastos en la Asamblea Legislativa? Conversamos en nuestro inicio de semana con la Contralora Marta Acosta.
Como si esto fuera poco, para cumplir con esas rigurosidades, el presupuesto ordinario de la República que los diputados examinan de cara a su aprobación a más tardar el último día de noviembre, Hacienda dejó por fuera gastos ineludibles que deberá afrontar, como por ejemplo las cuotas y otras aportaciones estatales a la Caja Costarricense del Seguro Social.
¿Cuál es la idea de "engañarnos" con estos recortes y estas omisiones?
La Contralora General de la República, Marta Acosta, sin traspasar las formas correctas del lenguaje político, dejó poco margen a la invención en su comparecencia la semana pasada ante la Asamblea Legislativa.
Entre muchas otras cosas, dijo que los recortes a distintas instituciones fueron hechos “sin ningún criterio ni definición de prioridades”.
Enfatizó, por tanto, que los más vulnerables pagarán los platos rotos, ellos son “la válvula de escape… Los ajustes llegan si usted los hace y, si usted no los hace, también llegan, pero llegan más dolorosos… el ajuste se está empezando a dar solo”.
¿Hay maneras de corregir este temerario plan de gastos en la Asamblea Legislativa? Conversamos en nuestro inicio de semana con la Contralora Marta Acosta.