En la Caja Costarricense de Seguro Social, podría decirse, reina momentáneamente la tensa calma. Obviamente, se trata de un “mientras tanto”. Mientras se define el pendiente del ajuste salarial prometido a sus 54 mil funcionarios.
El caso es que esta misma semana la Junta Directiva podría conocer los nuevos criterios jurídicos que la también nueva presidenta ejecutiva, doña Marta Esquivel, presentaría al órgano colegiado, aunque no se sabe bien con qué propósito, dado que aunque el Mandatario Rodrigo Chaves haya dicho que el incremento no era irreversible, los sindicatos de salud argumentan que la aprobación por parte de la directiva el 8 de setiembre es un acuerdo en firme y por tanto, inalterable.
El hecho, como está bien fresco aún, provocó nada más y nada menos que la destitución de don Álvaro Ramos Chaves, que solo alcanzó a permanecer en el cargo 4 meses, en lo que directivos de la entidad califican como una intromisión excesiva del gobierno central en la autonomía de la Caja.
El criterio anticipado de doña Marta, pieza del círculo de confianza del presidente de la República, es que resultaría mejor posponer ese ajuste salarial hasta que se cumplan las disposiciones de la regla fiscal, es decir, hasta que se alcancen los objetivos de estabilización mínima de las finanzas del país.
También, entre tanto, muchos otros temas siguen puestos en cartera. El más reciente, sin duda, la promesa de terminar en unas cuantas semanas con las listas de espera de las mamografías; ello en conmemoración del mes de lucha contra el cáncer de seno, pero también en atención a las resoluciones constitucionales que han urgido varias veces a la CCSS a terminar con el problema no solo de esas, sino de todas las listas de espera.
De estos y otros temas conversamos con la presidenta ejecutiva de la Caja, doña Marta Esquivel.
El caso es que esta misma semana la Junta Directiva podría conocer los nuevos criterios jurídicos que la también nueva presidenta ejecutiva, doña Marta Esquivel, presentaría al órgano colegiado, aunque no se sabe bien con qué propósito, dado que aunque el Mandatario Rodrigo Chaves haya dicho que el incremento no era irreversible, los sindicatos de salud argumentan que la aprobación por parte de la directiva el 8 de setiembre es un acuerdo en firme y por tanto, inalterable.
El hecho, como está bien fresco aún, provocó nada más y nada menos que la destitución de don Álvaro Ramos Chaves, que solo alcanzó a permanecer en el cargo 4 meses, en lo que directivos de la entidad califican como una intromisión excesiva del gobierno central en la autonomía de la Caja.
El criterio anticipado de doña Marta, pieza del círculo de confianza del presidente de la República, es que resultaría mejor posponer ese ajuste salarial hasta que se cumplan las disposiciones de la regla fiscal, es decir, hasta que se alcancen los objetivos de estabilización mínima de las finanzas del país.
También, entre tanto, muchos otros temas siguen puestos en cartera. El más reciente, sin duda, la promesa de terminar en unas cuantas semanas con las listas de espera de las mamografías; ello en conmemoración del mes de lucha contra el cáncer de seno, pero también en atención a las resoluciones constitucionales que han urgido varias veces a la CCSS a terminar con el problema no solo de esas, sino de todas las listas de espera.
De estos y otros temas conversamos con la presidenta ejecutiva de la Caja, doña Marta Esquivel.