Justo al cumplir 13 meses de nuestro primer caso covid 19, llegamos a los 3,000 decesos. ¿Se acuerdan cuando -incrédulos- pensamos que las autoridades sanitarias exageraban lo indecible porque allá a inicios de abril anunciaban la adquisición de 3,000 bolsas para cadáveres?
La realidad nos confronta de manera muy cruda. Y hoy, a la vista, tenemos por delante un incremento importante en el número de contagios, luego de un periodo de relativa estabilidad. En la última semana (de miércoles a martes) registramos 3,082 nuevos positivos, 57 ingresos hospitalarios adicionales, para un total de 390 de los cuales, 27 están en cuidados intensivos para sumar 190. Vamos a 220 mil casos acumulados con una tasa de contagio de 1,08.
La tasa de vacunación es de 7,44 por cada 100 habitantes (con datos de la semana pasada) y el rector sanitario anuncia que en vista del incremento de contagios, ahora el 90% de las dosis que vayan ingresando se destinarán al grupo prioritario número 2, el de todos los mayores de 58 años. Si todo sale como está previsto entre finales de abril e inicios de mayo este grupo estará completo para continuar con el siguiente segmento, el de menores de 58 con factores de riesgo.
La esperanza por supuesto es que las vacunas sigan llegando semanalmente -si es posible a un ritmo igual o mayor que el de esta semana en la que contamos con casi 150 mil dosis adicionales. Aunque las vacunas en el país no son de aplicación obligatoria, se requerirán todas las posibles porque la reticencia a la inoculación en nuestra población es muy baja. Los únicos obligados, bajo amenaza de denuncia penal de acuerdo con el jerarca Daniel Salas, son los miembros del personal de salud que tienen entre sus manos, las vidas de los demás.
En obligado repaso de coyuntura sanitaria de nuevo nos encontramos con el Dr. Mario Ruiz, Gerente Médico de la CCSS.
