La primera parte de la semana, después del retiro del presidente Alvarado del plan de negociación con el FMI, tampoco deparó nada concreto que baje la temperatura social y proyecte algún acuerdo necesario y pronto. En la tarde del martes hubo, por ejemplo, "una reunión preparatoria dará insumos para el diálogo multisectorial que vendrá pronto", decía un tuit del Presidente.
El tiempo pasa y las oportunidades también. Cada día puede haber un ingrediente más que complique el cauce de acuerdos políticos entre el Ejecutivo y sectores organizados que después puedan llegar a la Asamblea Legislativa con algún margen de viabilidad para atender la emergencia financiera, mostrarnos ante el mundo como un país responsable y comenzar ya lanzar reformas estructurales para corregir lo que ciertamente hemos dejado por décadas.
Por eso urge hallar canales institucionales para un diálogo que no sea para posar ni para explorar el terreno. Ya hay trabajo hecho de varios sectores y no podemos empezar de cero, advierte la expresidenta Laura Chinchilla al reconocer la dificultad de carecer de una base de negociación después de que el mandatario retiró el documento completo y reiteró la necesidad de buscar al FMI como salvavidas.
Lo profundizamos en #HablandoClaro este miércoles con la expresidenta Chinchilla, sus experiencias en situaciones parecidas pero menos complejas (lo admite ella) y una ansiedad confesa por ver buenas señales.