Es sabido que el Ministerio de Hacienda es una de las sillas más calientes del Ejecutivo. Ningún jerarca acepta el cargo pensando que no se quedará todo el cuatrienio. Pero lo cierto es que en ese puesto casi nunca ninguno logra acabar el periodo.
Para la Administración Alvarado Quesada, Hacienda se convirtió en un inmenso dolor de cabeza desde que doña Rocío Aguilar decidió renunciar en plena ejecución del plan de fortalecimiento de finanzas públicas -según dejó claramente establecido- para no exponerse y no exponer al presidente de la república, al juego político que la decisión de la Contraloría General planteó, al concluir que por haber salvado al país del default del que tan cerca estuvimos, debía ser sancionada con un mes de suspensión laboral. Y eso –como sabemos- era más de lo que la ministra estaba dispuesta a aceptar.
Su salida planteó un gran signo de interrogación acompañado de incertidumbre, que se despejó cuando se anunció que un gurú de las finanzas del Banco Mundial regresaba a Costa Rica tras tres décadas de ausencia para hacerse cargo del barco de la hacienda pública. Pero el presidente y él no se conocían. Y él tampoco conocía las formas políticas del país y se enfrentó muy pronto (también por el fondo) con desavenencias y rupturas. Hasta que el hilo se reventó la semana pasada.
Elián Villegas llega como el tercero en apenas dos años de administración. Se le recrimina no ser economista de profesión. Aunque ya hemos tenido titulares de Hacienda que no lo eran, como el Ing. Rodolfo Méndez Mata. Aprehensiones aparte, lo que sí es don Elián es cercano colaborador del mandatario. Hay una relación previa y la designación de don Carlos Alvarado pone énfasis ahora en la confianza. Así parece desprenderse de sus últimas decisiones. Ya no hay tiempo para probar lealtades.
El mandato que recibe, ha dicho, es la contención del gasto, la estabilidad de las finanzas públicas y la protección de los damnificados por el Covid 19. ¿Pero, cómo hacer chocolate sin cacao? Conversamos en Hablando Claro con Elián Villegas, el nuevo ministro de Hacienda.
