Lidiar con una enfermedad infecto-contagiosa de la que se conoce tan poco porque irrumpió en la civilización humana hace menos de cuatro meses, implica una enorme cantidad de estudios e hipótesis que frenéticamente se abren paso en las academias de investigación, institutos científicos, farmacéuticas y un sinfín de centros mundiales que buscan respuestas y tratamientos.
Por eso, cada despertar nos encontramos con nueva información esperanzadora que indica, que a falta de una vacuna que ponga alto a la pandemia, otras opciones terapéuticas podrían afectar decisivamente el curso hasta ahora imparable de enfermedad, muerte y destrucción económica que el nuevo coronavirus está causando.
Por ejemplo, a partir de estudios de autopsias, médicos italianos han lanzado la hipótesis de que la gran mayoría de los pacientes no fallecieron por neumonías (neoumonitis) como se creía, sino por la formación de múltiples coágulos por lo que la situación crítica no sería respiratoria sino cardiovascular.
Esto significa, en palabras muy sencillas, que no es el virus el que mata, sino la reacción del organismo para defenderse del cuerpo extraño que lo invade lo que termina por volverse en su contra. Dicho en otras palabras, el problema principal de las complicaciones no es el Covid19 sino la reacción inmunitaria que destruye las propias células.
Lo importante de este abordaje que aún está en proceso de constatación médico científica mundial es que por un lado confirmaría que antiinflamatorios comunes y antibióticos existentes son los aliados determinantes para la inmensa mayoría de los casos de personas contagiadas que se tratan en los hogares y, por otro lado, permitiría atacar con más éxito los casos más complicados de aquellos quienes llegan a requerir hospitalización y cuidados críticos; que ni siquiera deberían (tesis muy polémica aún) ser intubados; es decir, no deberían requerir los hasta hoy muy preciados respiradores. Este es uno de los muchos debates médicos en curso y lo conversamos en con el Dr Álvaro Avilés Montoya, Jefe de Infectología del Hospital México.