La agenda legislativa de sesiones extraordinarias que empezó este mes de diciembre acompañará al Gobierno hasta su mitad de cuatrienio, en mayo próximo. Es evidente el esfuerzo por culminar el proceso para ingresar a la OCDE y por atender los apremios económicos de los hogares que parecen pasarle factura a la imagen popular del presidente Carlos Alvarado.
Nada es fácil ahora con la fragmentación del poder legislativo, porque además estamos en campaña para las elecciones municipales y porque ya empiezan a verse los movimientos desde el lente de posibles candidaturas para el 2022. Además, el Gobierno acaba el 2019 con su debilidad de origen, incluso después de haberse reformado paulatinamente en este año con la sustitución de al menos cuatro ministros de alta relevancia. Otros siguen y reciben aplausos, como Rodolfo Méndez Mata en el MOPT.
¿Qué mensaje puede estar recibiendo la población de parte del Gobierno en este cierre del 2019? ¿Podrían las negociaciones políticas hacer que el Presidente incumpla su promesa de saldar este mismo años la deuda con la norma técnica sobre aborto impune? ¿Acierta el Gobierno en el abordaje de la percepción de crisis que expresa la población en las encuestas?
Con el politólogo y comunicador Gustavo Araya analizamos el cierre de año del Ejecutivo y sus delicados hilos con una Asamblea Legislativa que parece haber aprendido a sacar frutos en medio de la confusión y los enfrentamientos públicos. Una gran parte de la sociedad, preocupada más por el empleo y por llegar a fin de mes, observa entre escéptica y expectante.
