Entre tanto conflicto social y los nublados del día siempre hay quienes pueden sacar ventaja. Lo aprovechan sobre todo los que se mueven al margen de la ley con recursos que suelen sobrepasar a las fuerzas del Estado. No faltan las versiones sobre grupos criminales que sacan la cabeza en momentos confusos de protestas en la provincia de Limón, por ejemplo. Eso dificulta separar un problema de otro problema y dar la debida atención a cada escenario particular desde el Estado, con los recursos limitados como están.
La industria del narcotráfico tiene de por sí tiene tendencias propias marcadas por las redes internacionales y también por el deterioro social de algunas de nuestras regiones. El desempleo es también un factor de riesgo. Y si a ello sumamos los aparentes intentos de algunos grupos por desestabilizar al país con supuestas reivindicaciones políticas, el cuadro se vuelve más delicado. En este marco tendremos nuestro Hablando Claro con la presencia del director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Walter Espinoza.