Fotografía: Rob Lambert / Unsplash
Salvo la pérdida de la salud, el desempleo es la condición que más afecta la estabilidad personal y familiar y consecuentemente la de la sociedad en su conjunto. En nuestro caso, aún cuando en el primer trimestre de este año el número de personas empleadas se incrementó en 167,000 la dinámica de la actividad económica fue claramente insuficiente como para resultar significativa respecto de las demandas de puestos de trabajo que se requieren.
De acuerdo con la Encuesta Continua de Empleo del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) vivimos un momento poco halagüeño, porque mientras el empleo creció de a poco al despuntar el año, creció también la cantidad de desempleados (11.3% , lo que implica 47,000 en el primer trimestre de 2019 respecto del mismo período del 2018), aumentó además el subempleo (8.6%) y el empleo informal llegó a un millón de personas, con lo cual casi la mitad del trabajo en Costa Rica (46.1%) se práctica en la informalidad.
Poco halagüeño es también que las condiciones internacionales de las que de manera determinante depende nuestra economía, tampoco apuntan en la mejor dirección. Así las cosas, ¿cuáles son las vías de salida de corto y mediano plazo para incrementar las posibilidades de empleabilidad de la fuerza laboral?
Con la especialista del Estado de la Nación, Natalia Morales Aguilar, intentamos esclarecer las opciones de nuestro mercado laboral en el presente.