La economía de Costa Rica entra al 2019 como desperezándose de una pausa navideña que ayudó a bajar los ánimos después del cierre convulso de las finanzas públicas, después de los aguinaldos, del pico en el comercio y de la reforma fiscal aprobada a pesar de la huelga de casi 100 días. Un cierre para no repetir.
Como ocurre después de las sacudidas, conviene repasar qué fue lo que pasó para saber qué puede pasar en adelante y qué se puede enmendar o atenuar. Comprender cómo acabamos el 2018 para saber cómo empezamos un 2019 en el que, coincidimos todos, urge aprovechar las oportunidades para dinamizar la economía. Si crecer un 3% ya era insuficiente, quedar por debajo de esa cifra es más que preocupante. Hablamos de mucho dinero que deja de generarse y de tributar, pero también de miles de empleos que no se crean.
Bienvenidos a compartir esta “fotografía de inicio” este jueves con el presidente del Banco Central, Rodrigo Cubero.