Fotografía: Katya Alvarado - Semanario Universidad
Tal vez ahora que nos hemos tenido que dar baños de realidad esperando que en sus premuras Hacienda logre reunir todos los “coyoles” para terminar el año honrando tanto compromiso pendiente, vayamos tomando conciencia de que el tema del déficit no era cosa de que nos querían asustar con la vaina vacía o con el cuento aquel del lobo que nunca llegaba...
Tan inminente era el precipicio que hasta la Sala Cuarta por primera vez emitió un fallo unánime que sienta jurisprudencia sobre el principio constitucional de las finanzas públicas.
¿Y qué implica esto?
Pues simplemente que en adelante habrá que observar que se cumpla de verdad el artículo 176 de la Carta Magna que obliga a respetar el vulnerado principio de equilibrio financiero, porque no hay manera que obligar al Estado a cumplir con sus obligaciones sociales si no tiene solvencia económica para materializar los beneficios que debe asegurar. En otras palabras, sin cacao no hay chocolate.
“El Estado ideal -dice la Sala- es el Estado posible”. Sobre estos principios cardenales de sostenibilidad de nuestro Pacto Social conversamos con el Magistrado Paul Rueda, instructor del fallo que hizo posible que hoy el país tenga colocada la primera piedra para avanzar en la solución del problema fiscal.