La buena noticia sobre el siempre polémico tema del arroz en Costa Rica, es que ante la alerta que emitieron los agricultores días atrás en el sentido que el CNP no podría seguirles comprando la cosecha lista ya para cegar, hubo movimientos muy rápidos en el Ejecutivo de modo que el próximo lunes se reanudará el recibo del cereal, a través de varias de las industrias locales.
El embrollo se produjo porque el Consejo Nacional de la Producción enfrentó problemas para seguir comprando la cosecha 2022-2023 (ya había adquirido seis mil doscientas toneladas) y cuando corrió la noticia, los agricultores resultaron presos del temor.
La jefa de la bancada oficialista en el Congreso aseguró que los agricultores ya pueden dormir tranquilos, pues hay en proceso una modificación presupuestaria de 1,700 millones que solo espera aval de la Contraloría y también 17,300 millones adicionales que Hacienda deberá autorizar, con lo cual -dijo- no solo terminarán de ejecutar las adquisiciones de esta cosecha, sino que también se pagarán todas las facturas pendientes de compras que se hicieron a través del Programa Abastecimiento Institucional, PAI.
Otro giro casualmente también esta semana con el grano, fue el anuncio del, por tanto, de una resolución de la Comisión de Promoción de la Competencia, COPROCOM, que sancionó a nueve empresas del sector agroindustrial que se colisionaron en 2019 para no comprarle el arroz a los productores locales hasta que se publicara un decreto del precio al consumidor, una práctica a todas luces anticompetitiva.
Del fallo no se sabe mucho, pues falta el pronunciamiento completo, así que por ahora no se conocen los nombres de las sancionadas, ni los montos a cada una, ni las razones de fondo. Se sabe sí que se trata de multas fuertes que oscilan entre los ocho millones y los dos mil millones de colones.
Todo esto pone de nuevo en la picota la existencia del andamiaje de la controvertida CONARROZ, varios de cuyos industriales ya habían sido sancionados por la misma Comisión años atrás.
En síntesis por ahora, el abasto local de grano está seguro y eso sí, el precio al consumidor sigue siendo prácticamente el mismo. Con el economista agrícola y experto en la regulación del mercado arrocero, Víctor Umaña conversamos en Hablando Claro.
El embrollo se produjo porque el Consejo Nacional de la Producción enfrentó problemas para seguir comprando la cosecha 2022-2023 (ya había adquirido seis mil doscientas toneladas) y cuando corrió la noticia, los agricultores resultaron presos del temor.
La jefa de la bancada oficialista en el Congreso aseguró que los agricultores ya pueden dormir tranquilos, pues hay en proceso una modificación presupuestaria de 1,700 millones que solo espera aval de la Contraloría y también 17,300 millones adicionales que Hacienda deberá autorizar, con lo cual -dijo- no solo terminarán de ejecutar las adquisiciones de esta cosecha, sino que también se pagarán todas las facturas pendientes de compras que se hicieron a través del Programa Abastecimiento Institucional, PAI.
Otro giro casualmente también esta semana con el grano, fue el anuncio del, por tanto, de una resolución de la Comisión de Promoción de la Competencia, COPROCOM, que sancionó a nueve empresas del sector agroindustrial que se colisionaron en 2019 para no comprarle el arroz a los productores locales hasta que se publicara un decreto del precio al consumidor, una práctica a todas luces anticompetitiva.
Del fallo no se sabe mucho, pues falta el pronunciamiento completo, así que por ahora no se conocen los nombres de las sancionadas, ni los montos a cada una, ni las razones de fondo. Se sabe sí que se trata de multas fuertes que oscilan entre los ocho millones y los dos mil millones de colones.
Todo esto pone de nuevo en la picota la existencia del andamiaje de la controvertida CONARROZ, varios de cuyos industriales ya habían sido sancionados por la misma Comisión años atrás.
En síntesis por ahora, el abasto local de grano está seguro y eso sí, el precio al consumidor sigue siendo prácticamente el mismo. Con el economista agrícola y experto en la regulación del mercado arrocero, Víctor Umaña conversamos en Hablando Claro.