Si bien es cierto el procedimiento mediante el que se acordó una tibia amonestación escrita a los integrantes de la más alta instancia de justicia penal del país es secreto por ley, nada impide que los 22 magistrados que participaron en la sesión hagan públicos sus votos.
Aún más, el tan cuestionado mecanismo tampoco estaba escrito en piedra y pudo haberse sopesado "respecto de principios y valores del Derecho de la Constitución" .Así lo sostiene el Foro de Justicia, una asociación de organizaciones que trabajan en pro del mejoramiento de los mecanismos de elección de magistrados, así como de transparentar y modernizar muchas de las sensibles tareas del Poder Judicial.
De acuerdo con el pronunciamiento, el manejo de este caso que ha golpeado a la opinión pública por el bochorno de su resolución final "puso de manifiesto una aceptación de la opacidad ajena a los principios de rendición de cuentas y transparencia propios de las democracias modernas".
El Foro, como otras muchas voces que se alzan en contra de lo sucedido, aduce la gravedad de haber "desaplicado" el principio de proporcionalidad entre la falta y la sanción pues no es de recibo que un error tan grave como el cometido por la Sala Tercera al deshacerse de una investigación por delitos de corrupción fuera calificado como una falta menor.
Este fin de semana también la destacada Jueza Rosaura Chinchilla Calderón pidió a los magistrados sujetos al proceso disciplinario que dimitan: "¡Por favor renuncien! Ustedes se van a sus casas con una pensión...nosotros nos quedamos limpiando los pedazos".
Calderón recordó que los embates contra el Poder Judicial provienen de su misma cúpula. "Uso de recursos públicos para beneficio propio (incrementos de alta gerencia, ruptura del tope de cesantía, pago de dobles prestaciones, choferes, vehículos, viajes y celulares a la magistratura y pésimo manejo del fondo de pensiones, etc); el desprestigio internacional producto de sucesivas condenas de tribunales de derechos humanos...y la desmejora en la calidad del servicio de justicia..."
De tal magnitud es el eco es la reacción por la desafortunada decisión de la Corte Plena la semana pasada. Y numerosos sectores estiman que la presión debe continuar; acaso con el propósito de empujar las renuncias que urge ésta depuración.