Al menos 55 muertos y más de mil heridos es el saldo preliminar de la sangrienta jornada de protestas vivida en la franja palestina de Gaza, en el “gran día de Israel” como lo calificó el Presidente Donald Trump.
Fue este lunes 14 de mayo, cuando Estados Unidos dio el “histórico paso” -según el Primer Ministro Benjamín Netanyahu- de trasladar su representación diplomática de Tel Aviv a Jerusalem.
Una jornada sangrienta y sin precedentes desde la guerra del 2014 en Gaza. Los palestinos lanzaban piedras y hacían arder neumáticos y marchaban según el ejército israelí en el orden de 40 mil en protesta por la decisión estadounidense. Al desatender la orden militar de no avanzar, fueron repelidos.
La frontera es zona militar cerrada y los disturbios continuarán este martes en la conmemoración del Día de la Nakba (Día del Desastre) que para los palestinos refiere a siete décadas de exilio y pérdida de territorios; todo lo contrario de la celebración del 70 Aniversario de la Creación del Estado de Israel por parte de Naciones Unidas.
Las protestas iniciaron desde el 30 de marzo y ya llevan más de un centenar de víctimas mortales y unos 10 mil heridos.
