Nuestros peores temores se confirmaron. Se sabía que ocurriría tarde o temprano. Aunque respiramos aliviados cuando se descartó contagio dos meses atrás en el Carlos María Ulloa era cuestión de tiempo para que el virus entrara a los centros de larga estancia; y este fin de semana se confirmaron brotes, primero en el Hogar Asociación Vicentina de Escazú y luego en el Santiago Crespo de Alajuela. Hay por lo menos medio centenar de casos entre personal y adultos mayores (al menos dos fallecieron ya), así que las autoridades redoblaron esfuerzos trasladando pacientes y contratando personal de relevo.
La edad se sabe es un factor que complica, pero es solo uno. Analizamos una vez más el perfil de los más de cien fallecidos en nuestro país (115 hasta el mediodía del lunes) así como de los que luchan por sobrevida en las UCI, hasta ahora 56 del total de 323 hospitalizados.
Pero no olvidemos que la mayoría de los confirmados no están necesariamente enfermos, y que aún estándolo no requieren estancia hospitalaria de modo que alistar lo necesario para el cuido y recuperación en casa, es un ejercicio que no está de más, aunque probablemente no lo hayamos considerado. Algo así como saber lo que debemos tener a mano en caso de un sismo grande, pero no lo disponemos porque preferimos pensar que no ocurrirá.
Adicionalmente repasamos consejos para trabajar, salir a comprar e incluso a pasear. Recomendaciones para convivir con el virus en el ambiente, entendiendo que el reto es continuar la reapertura para no asfixiar la actividad económica, de cara especialmente a la reapertura de la frontera aérea y –ojalá- de algunas de las limitaciones que privan hoy particularmente en la Gran Área Metropolitana restricciones que están siendo evaluadas para la primera quincena de agosto. Nos ayuda en la tarea la Dra. Guisselle Guzmán Jefe de Epidemiología de la Caja Costarricense del Seguro Social.